Inicia proceso de asignación de puestos en Mercado San Miguelito
El proceso de asignación formal de espacios en el Mercado San Miguelito prioriza a vendedores históricos con respaldo legal y posibilidad de herencia.
Ago 29, 2025- 12:00
Este viernes arrancó el proceso de asignación formal de puestos en el renovado Mercado San Miguelito. La Dirección de Mercados inició la distribución de espacios comerciales con prioridad para los vendedores que operaban ahí antes de su reconstrucción, bajo un procedimiento definido, documentado y abierto.
Según declaraciones previas del presidente Nayib Bukele, “los puestos serán asignados principalmente a los vendedores históricos, a los que ya tenían su puesto aquí antes”. Con base en este criterio, cientos de comerciantes comenzaron hoy la fase de reubicación en el nuevo edificio, luego de más de dos años de espera tras el incendio ocurrido en 2021.
Prioridad para los que ya estaban
El proceso reconoce como prioridad a quienes contaban con un puesto en el mercado antes de su cierre. Según autoridades, se busca asegurar continuidad a través de un contrato que formaliza la ocupación del espacio.
Esto permite a los comerciantes históricos regresar a su actividad en el mismo sitio donde desarrollaron su negocio por años. Para muchos, representa no solo estabilidad económica, sino también una conexión con su clientela y comunidad.
“Nos sentimos más tranquilos sabiendo que tendremos contrato. Ahora podremos pensar a largo plazo”, comentó Ana Portillo, vendedora de verduras con más de 15 años en el mercado.

Asignación con reglas claras
La Dirección de Mercados ha detallado que el proceso se basa en fases organizadas, con requisitos definidos. Todo vendedor registrado tendrá la posibilidad de presentar su documentación y optar por la formalización.
Este procedimiento busca dar transparencia al sistema de asignación mediante criterios claros:
- Apertura: participación para todos los comerciantes habilitados.
- Documentación: cada paso queda registrado oficialmente.
- Prioridad histórica: se respeta el historial de ocupación de los vendedores.
Estas reglas permiten disminuir la incertidumbre y dan respaldo a quienes cumplen con los requisitos establecidos.
Contrato, respaldo y posibilidad de herencia
Una de las novedades de esta asignación es que cada puesto se entregará con un contrato legal. Este documento representa más que un permiso: es un respaldo formal para ejercer la actividad comercial dentro del mercado.
El contrato otorga derechos, pero también establece deberes. Entre los beneficios está la posibilidad de heredar el puesto a familiares directos, lo que permite continuidad en el negocio familiar y proyecciones a largo plazo.
La medida también tiene impacto en la bancarización y formalización: con un documento legal, los vendedores podrán demostrar ingresos, solicitar créditos o participar en programas de apoyo a pequeñas empresas.

Orden y beneficios para todos los actores
El nuevo sistema beneficia a distintos grupos:
- Comerciantes: aseguran su lugar de trabajo y obtienen respaldo legal.
- Familias: pueden pensar en sucesión del negocio sin perder el espacio.
- Usuarios del mercado: se promueve una experiencia más organizada y segura.
- Instituciones locales: se facilita el control de permisos y la planificación de políticas públicas.
Con esta reestructuración, se busca reducir la informalidad y dar orden a la administración de los espacios, lo que podría replicarse en otros mercados municipales del país.
Mirando al futuro del comercio local
En el corto plazo, la medida genera tranquilidad entre quienes temían no recuperar su puesto. A mediano y largo plazo, puede traducirse en mejoras operativas para el mercado en su conjunto. Al tener reglas claras y contratos en mano, los comerciantes tienen incentivos para mejorar sus negocios, invertir en sus espacios y pensar en crecer.
Además, la posibilidad de transferir el puesto a un hijo o hija agrega valor. Para muchas familias, este lugar representa su principal fuente de ingresos y un legado importante.
La expectativa entre los vendedores es que el proceso se mantenga justo, sin favoritismos ni cambios de última hora. La transparencia será clave para consolidar la confianza en esta nueva etapa.
El inicio del proceso de asignación en el Mercado San Miguelito marca un punto de inflexión para el comercio informal tradicional. Pasar de ocupaciones informales a contratos con validez legal puede cambiar la dinámica comercial de forma estructural.
El enfoque de priorizar a los comerciantes históricos busca equilibrar justicia con orden. Si el proceso se completa con claridad y sin obstáculos, podría establecer un modelo replicable en otros espacios del país donde la venta informal sigue siendo dominante.
Para los vendedores, este no es solo un regreso físico al mercado. Es una oportunidad para consolidar su negocio, proyectarse a futuro y formalizar un oficio que, por generaciones, ha sostenido la economía de muchas familias salvadoreñas.